google-site-verification=W4JiPUkp_G2kZZVS-o62liN40WEVgPWgCCloRv-xIdc la luz del monte: POR LOS CORTADOS DE YESO DEL BAJO JARAMA.

martes, 13 de enero de 2015

POR LOS CORTADOS DE YESO DEL BAJO JARAMA.


El Río Jarama es el más largo de Madrid. Comparte sus aguas con Guadalajara y Toledo, antes de entrar en El Tajo. Es un río de grandes contrastes ambientales, de paisajes y bosques variados, de fauna y costumbres diversas... Hoy vamos a conocer una zona de uno de sus tramos bajos...




Está amaneciendo... La temperatura ambiental es de unos -3ºC. La tranquilidad en la zona es absoluta.




El río está cubierto por una ligera bruma. El agua de sus orillas está congelada. Algunos patos cucharas y ánades reales, se levantan al sentir mi presencia...




Una focha común busca alimento en la superficie del río. De vez en cuando se sumerge, y saca vegetación acuática en su pico.




Los álamos y tarays que acompañan al cortado, están pintados por la escarcha. No se ve un pájaro por la zona. Sólo se ve algún conejo, que desaparece muy rápido entre las matas de taray.




El día ha vencido a la noche. El sol viene acariciando con su luz los altos páramos. La ribera permanece cubierta por la fría escarcha, pero la vida y el trasiego de aves acuáticas no para...




Sobre las ramas caídas de un chopo, descansan dos cormoranes grandes. Uno abre sus grandes alas para que se aireen las plumas y se sequen bien, pues hace unos instantes que salió del agua. Cuando estén bien secos y sus cuerpos hayan recuperado las calorías perdidas, volverán a nadar y a bucear por el río en busca de peces.




En ciertas zonas del río, donde la extracción de arenas y gravas en el pasado no fue posible, habitan  pequeño bosquetes con grandes ejemplares de taray.




A media mañana, el sol se asoma sobre los altos cortados de yeso. En la umbría todavía se puede ver el suelo cubierto por la escarcha. El río y sus árboles tienen más color...




Una joven garza real, nacida la primavera pasada, observa el paso de los peces. De vez en cuando, lanza su pico con su largo cuello y saca un pequeño pez del agua.




La luz limpia y cálida del día, sin ni una sola nube en el cielo, ilumina los cañizos y los álamos blancos del río. Ahora la temperatura es agradable, en torno a los 12ºC.




En una orilla del río, donde se ha hecho una pequeña charca, observo que entran a pescar dos martines pescadores. Un adulto y un joven del año. Los dos se posan en las mismas ramas y matas. Entran, observan, cambian de posadero, alguna vez se lanzan para capturar un pececillo, y se van por el río. Así durante las dos horas que los observo. En la fotografía vemos al joven del año, muy interesado con lo que ocurre en la charca...




Ahora me encuentro dentro de un estrecho torrente, que se inicia en los altos cerros y páramos de la zona. Estos estrechos callejones de yeso, margas y sedimentos, los han ido excavando las aguas de las tormentas durante miles de años.




Por el camino descubro los restos de un zorro, que abatieron los cazadores al comienzo de la temporada. Sobre el pasto observo su cráneo... Que nos mira como un testigo mudo, de aquel animal elegante y con chispa que dada vida a estos barrancos.




Por esta zona, la civilización humana pasó muy temprano, hace unos quince mil años. Carpetanos, romanos, visigodos, árabes, cristianos... Han dejado los cerros, laderas y barrancos, poblados de esparto, donde apenas crecen algunos tomillos y coscojas. Los montes de encinas, quejigos y coscojas, desaparecieron bajo la presión económica de estas civilizaciones.




En los pequeños y grandes cortados yesíferos, habita una avifauna variada, propia de los cantiles y de las zonas abiertas y subdesérticas: collalbas negras, roqueros solitarios, hacones peregrinos, cernícalos comunes, chovas piquirrojas, palomas bravías... En la fotografía vemos a un ejemplar macho de colirrojo tizón.




En las grandes paredes podemos ver antiguas cuevas, excavadas por el hombre hace siglos, donde se construyeron palomares "naturales" para cría silvestre de las abundantes palomas bravías.




En el río observo a una pareja de ánades reales. La hembra va delante, seguida del macho. Si todo va bien, a mediados de febrero la hembra estará incubando una media de doce huevos.




El sol de la tarde alumbra los grandes tarays y los altos cortados de la vega. Ahora se oye a las chovas piquirrojas que recorren las altas paredes. Con esta imagen dejo la zona... Por el camino observo el vuelo del macho del halcón. Unos metros por detrás llega la hembra... Y se pierden entre el cielo y los cortados...


4 comentarios:

  1. ¡Un placer descubrir la vida de tu puño, letra y objetivo, junto al curso del río Jarama!
    ¿Qué sería de la naturaleza sin sus grandes y aliados ríos? Todo lo abastecen, modelan y nutren soporando una presión, a veces, imposible.
    Aún hoy día, desaparecidos los bosques de quejigos, encinas y coscojas, bulle la vida en el bajo Jarama y 'La luz del Monte' nos lo muestra... magníficamente.
    Un saludo de 'Ojolince y Sra.'

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    1. Vivimos en un mundo que sólo podemos apreciar lo que tenemos o nos queda. Los ríos son las venas y arterias que han tallado la geografía, por los que fluye la vida desde las altas montañas hasta las bajas riberas. Un mundo lleno de contrastes diferentes, y todos muy interesantes...
      Gracias por tu comentario. Un cordial saludo a `Ojolince y Sra.´

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  2. Me ha sorprendido. Es exactamente el mismo paisaje que te encuentras en el Ebro en Zaragoza. Cortados de yesos, plantas gipsófilas (lógicamente), bosquetes de tamarices, amaneceres helados.... De hecho, se lo he enseñado a un compañero y efectivamente, se ha creído que era Zaragoza (una zona que llaman "Galachos de Juslibol"). Que curiosa la naturaleza... Saludos!

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    1. Hola Oscar, lo bueno que tiene la Península Ibérica es que tiene una geografía y un clima muy variados, que condicionan una vegetación y una fauna muy variada también, por la que han pasado variadas civilizaciones que que han influido en todo esto... En varias zonas se dan situaciones geográficas muy parecidas, debido al relieve, al clima y al uso que han tenido. Lo bueno que tiene todo esto, es que se pueden comparar las zonas y ver lo bueno de cada una y las mejoras que se pueden hacer... Me ha gustado mucho tu comentario y tu apreciación.
      Un cordial saludo.

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